El nombre propio que aparece pertenece al Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid.
Una falla encendida antes de tiempo,
palma de una mano estrechando la nada;
padres ahogados por culpa del remo;
pirómanos de Ourense a Zarzaquemada.
Un colibrí desafiando la gravedad.
Cuerpos que gritan verdades sin lengua.
Madrid comercia con el menor de edad,
si cesa a Arturo Canalda, no hay tregua.
Y entretanto las acciones policiales,
You Tube es una televisión parcial,
la resistencia aúna tratos “especiales”.
Las fresas de hoy ya no saben a na´.
Poemarios dentro de una lata oxidada,
sentimientos que se pierden en la mar,
mensajes húmedos de marejada
quien los encuentre que los vuelva a dejar.
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