sábado, 27 de febrero de 2010

Thor-menta.


Estoy expectante. Se supone que esta tarde visitará Madrid una ciglogénesis explosiva. Y no es el seudónimo de la porno star del momento, sino de una tormenta perfecta (el periodista que ha escrito esta ocurrencia podía haberse esmerado más) de tomo y lomo, una tempestad acromegálica; aunque cuando llegué a la meseta ya estará en proceso de disipación. Una pena, porque acababa de preparar un bañador y la toalla para disfrutar a lo grande; pero, por lo visto, es puramente aire en movimiento sin apenas agua. Vamos que habrá chicha pero sin limoná ¡Pues vaya tocomocho!
Veíamos, en estas semanas anteriores, como Canarias se convertía en un Aquopolis improvisado... tan acostumbrados ellos al sol bajo un clima casi africano, luego Madeira se desmenuzaba por el vendaval acuático (amén de la sensibilidad del jugador de turno) y ahora... le toca al chotis.
La verdad es que si alguien ha observado durante unos minutos el cielo de la capital de estos días grises; se habrá dado cuenta de lo pictórico que parecía; casi como si estuviera sacado de un oleo de John Constable. Una maravilla, sin duda, para los que se nos suele perder la mirada entre las nubes.
Mientras escribo esto la gente sigue en la calle jugando al fútbol, montando en bicicleta a 14 Cº. Una temperatura acorde con las fechas en la que nos movemos. Ciudadanos que se están saltando a la torera las medidas de prevención. Puede que sean tan escépticos como yo y piensen que todo esto del cambio climático es otro cuento de Satanás. Aunque pensaba lo mismo de la crisis económica y sigo parado.
Estoy, casi, seguro de la existencia de unas medidas de control ciudadanas sustentadas en el miedo por parte de las capas más "donosas" del poder. Ojalá pudiera demostrar con mis manos lo que sostiene mi intuición. De momento, me conformo con la foto de una amiga en la que aparece un cáctus floreciendo en pleno mes de octubre o noviembre. Dos ya no son uno.

2 comentarios:

Alicia Martín dijo...

Un texto interesante. Así q, sólo será una "tormenta" de polvo y poco más?? pues vaya, q desilusión. Sigue así, escribiendo tan bien como siempre. Q estas palabras q escribes hoy lleguen a las páginas de grandes periódicos mañana, :-) . Por cierto, q buena la frase: "Ojalá pudiera demostrar con mis manos lo que sostiene mi intuición", me ha encantado. Un beso.

Ruben Barroso dijo...

Habrá que ver como acaba el día, de momento ha llovido un poco aquí en Fuenla pero es más de lo mismo en estos días. Estoy de acuerdo con la frase que cita Alicia, es cojonuda deberías registrarla bajo una licencia Creative Commons xD.